El pasado Domingo 31 de Marzo, tuvo lugar en el Ex-convento del desierto de los leones, el magno festival medieval de primavera por parte de Kamelot, el castillo del Rey. Esta fue nuestra experiencia.

Primero quiero aclarar que nuestra llegada fue un poco tarde, al medio día aproximadamente. Por lo tanto, el acceso al desierto de los leones fue un poco caótico, debido a que ya no había lugares de estacionamiento disponibles y tuvimos que dejar nuestro transporte al lado de la carretera. Dejando esto de lado, la experiencia fue bastante agradable, con un acceso al festival bastante fluido y sin contratiempo.

El festival tuvo como sede un patio rodeado de una zona boscosa, acompañado de personas caracterizadas de personajes acorde a la temática. A nuestra llegada fuimos recibidos por una pequeña aldea montada de hadas y duendes, que de manera inmediata te conectan con el ambiente natural que ofrece el ex-convento, seguido por un mercado con una amplia variedad de artículos medievales, vikingos, artículos relacionados con magia y brujería, además de artículos de cuentos e historias relacionados a la época como Game Of Thrones, El Señor de los Anillos, Harry Potter, etc.

Brujos, hechiceros, hadas, duendes, faunos y un sin número de personajes nos acompañaron durante toda esta experiencia, volviéndola mas sumergible. Acompañada de presentaciones de danza, música, cetrería, arquería, lo que vuelve esta experiencia algo completamente familiar. Incluso, la venta de hidromiel estaba permitida, pero algo restringida, ya que algunos puestos no ofrecieron degustación porque textualmente «no lo tenían permitido» y únicamente te vendían el articulo cerrado.

Además del mercadillo y las presentaciones, también encontramos actividades de arquería y combate de espadas, con costos bastante accesibles. La comida fue otro punto a favor ya que había variedad para cualquier paladar, desde unos ricos tlacoyos hasta cortes de carne, choripán, salchicha alemana y brebajes mágicos, los precios rondaban entre los $50 y $300.

En general, la experiencia fue bastante gratificante. Este tipo de eventos nos transporta en el tiempo a lugares que de otra manera sería imposible de vivir. Recomendamos acudir con grupos de amigos y familia, ya que esta es una experiencia para vivir y compartir con los seres queridos, y qué además se debe vivir al menos 1 vez en la vida. Despójate de complejos y date la oportunidad de conocer otro tipo de culturas. Acude disfrazado si así lo deseas, para la imaginación no existen los límites.

Por ultimo queremos hacer la observación a los dueños del ex-convento, por su aportación a la experiencia inmersiva del lugar, al no contar con agua para los sanitarios, sin duda algo de lo mas medieval que se puede vivir.

¡Muchas Felicidades a Kamelot, el castillo del rey! A todas las compañías de danza, teatro, expositores y representación de batallas que hacen posible la realización de estos eventos. Nosotros nos encontramos ansiosos por las siguientes ediciones.